El Campamento Regional de la Patagonia tuvo lugar en Bahía Blanca del 5 al 10 de enero. El título fue "Libres de Culpa y ahora qué? Para chicos de 13 a 19 años.
Articulo:
"144 horas de luz"
“Libres de culpa y ahora qué?”, éste fue el lema de nuestro último campamento patagónico realizado en Bahía Blanca. El ex-seminario de la ciudad, el cual actualmente es uno de los centros de reunión del movimiento de los focolares, fue casa de 80 jóvenes metodistas entre 13 y 19 años, durantes 6 días.
Del 5 al 10 de Enero, tuvimos la oportunidad de crecer juntos, cada uno a su paso, bajo la luz del encuentro con los otros y con nosotros mismos.
Cada campamento, tiene sus momentos más movilizadores y éste no fue la excepción. Como dice Sábato, “En tiempos oscuros nos ayudan quienes han sabido andar en la noche”. En una de las puestas de sol, dos grandes mujeres nos dieron el privilegio de brindarnos su testimonio, de contarnos su “noche”. Ambas, una como madre y otra como víctima, compartían el haber luchado contra las drogas, las adicciones. Las mismas que hoy, oscurecen el camino de tantos jóvenes y adultos en nuestras congregaciones.
Tampoco faltaron las sorpresas; desde la película que se proyectó la primera noche (Spiderman3), la cual fue analizada en los estudios bíblicos; pasando por las tardes en la pileta, la fiesta de disfraces y la incorporación de nuevos talleres, (como mostacilla, economía social, velas y danzas, que se sumaron al ya imperdible taller de teatro). Estas fueron el resultado del trabajo de todos los organizadores y líderes que no solo se sentaron a pensar como añadirle esa magia de lo inesperado o nuevo a esos 6 días sino que se comprometieron para entusiasmar, sin desvirtuar el propósito del campamento. A su vez hubo una entrega por parte de los jóvenes que en más de un momento dejó a varios boquiabiertos. Como las clases de rap, de cumbia, de zapateo, de danzas galesas que recibimos de los acampantes. Pero por sobre todo, la muestra de “respeto social” que nos dieron. Se integraron sin importar sus distintas realidades, historias de vida o estratos sociales, para conformar una nueva verdad, una que no dejase a ninguno afuera. Según Machado “la verdad del hombre comienza cuando termina su propia estupidez”. Lo que distinguió a éste campamento fue su fuerte compromiso con los temas de hoy. No sólo se debatió respecto a las drogas, sino también sobre la homosexualidad, sobre el trato hacia las personas con capacidades diferentes, la discriminación entre clases, nuestra acción como cristianos ante las injusticias sociales y otros puntos. Cuestiones más fáciles de evadir que de discutir, siendo lo primero una estupidez y lo segundo lo verdadero, lo íntegramente enriquecedor, lo que nos hace crecer. Ojalá éste sea el comienzo de muchas más horas de Dios, ojalá que Él alumbre a través de todos nosotros los 359 días que restan.
Julieta Salgueiro - Líder de jóvenes
“Libres de culpa y ahora qué?”, éste fue el lema de nuestro último campamento patagónico realizado en Bahía Blanca. El ex-seminario de la ciudad, el cual actualmente es uno de los centros de reunión del movimiento de los focolares, fue casa de 80 jóvenes metodistas entre 13 y 19 años, durantes 6 días.
Del 5 al 10 de Enero, tuvimos la oportunidad de crecer juntos, cada uno a su paso, bajo la luz del encuentro con los otros y con nosotros mismos.
Cada campamento, tiene sus momentos más movilizadores y éste no fue la excepción. Como dice Sábato, “En tiempos oscuros nos ayudan quienes han sabido andar en la noche”. En una de las puestas de sol, dos grandes mujeres nos dieron el privilegio de brindarnos su testimonio, de contarnos su “noche”. Ambas, una como madre y otra como víctima, compartían el haber luchado contra las drogas, las adicciones. Las mismas que hoy, oscurecen el camino de tantos jóvenes y adultos en nuestras congregaciones.
Tampoco faltaron las sorpresas; desde la película que se proyectó la primera noche (Spiderman3), la cual fue analizada en los estudios bíblicos; pasando por las tardes en la pileta, la fiesta de disfraces y la incorporación de nuevos talleres, (como mostacilla, economía social, velas y danzas, que se sumaron al ya imperdible taller de teatro). Estas fueron el resultado del trabajo de todos los organizadores y líderes que no solo se sentaron a pensar como añadirle esa magia de lo inesperado o nuevo a esos 6 días sino que se comprometieron para entusiasmar, sin desvirtuar el propósito del campamento. A su vez hubo una entrega por parte de los jóvenes que en más de un momento dejó a varios boquiabiertos. Como las clases de rap, de cumbia, de zapateo, de danzas galesas que recibimos de los acampantes. Pero por sobre todo, la muestra de “respeto social” que nos dieron. Se integraron sin importar sus distintas realidades, historias de vida o estratos sociales, para conformar una nueva verdad, una que no dejase a ninguno afuera. Según Machado “la verdad del hombre comienza cuando termina su propia estupidez”. Lo que distinguió a éste campamento fue su fuerte compromiso con los temas de hoy. No sólo se debatió respecto a las drogas, sino también sobre la homosexualidad, sobre el trato hacia las personas con capacidades diferentes, la discriminación entre clases, nuestra acción como cristianos ante las injusticias sociales y otros puntos. Cuestiones más fáciles de evadir que de discutir, siendo lo primero una estupidez y lo segundo lo verdadero, lo íntegramente enriquecedor, lo que nos hace crecer. Ojalá éste sea el comienzo de muchas más horas de Dios, ojalá que Él alumbre a través de todos nosotros los 359 días que restan.
Julieta Salgueiro - Líder de jóvenes
1 comentario:
Muy bueno!!! felicitaciones y a seguir subiendo info!!!
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